Ser mamá es un maratón
Aquí les comparto un pedacito de mi sentir sobre la maternidad. Espero que muchas de ustedes se identifiquen. Las mujeres que somos mamás vivimos una realidad única: el descanso parece una quimera. Los periodos vacacionales de los hijos se transforman en otra etapa de intensa actividad, y el ciclo escolar regular es un constante malabarismo de responsabilidades. El cansancio se acumula, es una verdad innegable. La maternidad es, sin duda, una demanda incesante y un compromiso que se renueva día a día. Es un camino que, no sabemos cómo, pero vamos transitando con una fortaleza que nos sorprende. Sin embargo, no todo es agotamiento, demanda o compromiso; la maternidad es también una fuente inmensa de alegría, una profunda sensación de paz y una responsabilidad que abrazamos con amor. Cada noche, al contemplar a nuestros hijos e hijas dormidos, sentimos una bendición indescriptible. Es el alivio y la felicidad de saber que están bien, que están a salvo, lo que nos impulsa a seguir ad...